Después de publicar El juego lúgubre en Francia me di cuenta de que había un importante mercado fuera de España. Este álbum estaba pensado para el mercado francés. El protagonista es un pintor francés del romanticismo que, en una época en la que no existía la fotografía, debía viajar por oriente para captar aquellas exóticas imágenes. La primera entrega de esta serie era la antesala de oriente, la Alhambra de Granada. La serie no pasó de su primer número.